Las patologías del sistema digestivo en los niños provocan trastornos de las heces. En este caso, se produce un cambio en la consistencia de las heces, aparición de impurezas y dolor. Si tu cabra está estreñida, tu veterinario te dirá qué hacer y qué signos pueden aparecer. Podrá hacer un diagnóstico preciso y, en función de ello, seleccionar un tratamiento eficaz.
Posibles causas de estreñimiento en un cabrito
Existen bastantes condiciones anormales que provocan estreñimiento en los niños.
Atonía
La aparición de esta patología se debe a una nutrición inadecuada. A ello conduce lo siguiente:
- exceso de alimento que es difícil de digerir: paja, heno de baja calidad;
- exceso de concentrados en la dieta: cereales, piensos o salvado;
- uso prolongado de piensos acuosos: vinaza, pulpa de remolacha;
- impurezas de tierra o arena en los alimentos;
- Uso de alimentos en mal estado.
El desarrollo de la atonía es posible en el contexto de cambios en las condiciones de vida: la alteración del microclima y la alta humedad conducen a ella. La patología secundaria es causada por lesiones traumáticas de los órganos digestivos, intoxicación general, infecciones o patologías helmínticas. Las cabras enfermas presentan deterioro del apetito y falta de chicle. El estreñimiento suele ser reemplazado por diarrea. También se producen debilidad general, agotamiento, pérdida de brillo y turgencia.
Para hacer frente a la patología, es necesario eliminar los factores provocadores. Para enjuagar el proventrículo se debe realizar una infusión de 5-10 litros de una solución de sal de Glauber con una concentración del 1%. También puedes utilizar una solución de bicarbonato de sodio o ácido acético.
La normalización de la nutrición es de no poca importancia. El primer día se recomienda realizar una dieta en ayunas. Para prevenir el agotamiento, los nutrientes se administran por vía parenteral: solución de glucosa, preparaciones de calcio. El segundo día, está permitido utilizar heno y productos lácteos fermentados.
Enfermedades infecciosas
La infección de los cabritos con enfermedades infecciosas suele ser causada por 2 factores: la infección de la madre y la violación de las recomendaciones sanitarias e higiénicas. En el segundo caso, la enfermedad se propaga rápidamente entre los niños. Por lo tanto, ante los primeros síntomas de un trastorno, conviene aislar al animal infectado.
Además del estreñimiento, el desarrollo de patologías infecciosas está indicado por los siguientes signos:
- aumento de la temperatura corporal;
- estado deprimido;
- alteración del sistema digestivo;
- secreción nasal;
- tos;
- impedimento de movilidad.
Si el niño pierde el apetito y se vuelve menos juguetón, esto se considera un síntoma alarmante. En este caso, es importante comprobar la composición de la comida o la dieta de la madre y tratar la habitación con desinfectantes. Si el estado de tu mascota no mejora, debes contactar con tu veterinario.
Infestación parasitaria
El estreñimiento puede ser causado por fascioliasis o piroplasmosis. Con el desarrollo de la fascioliasis crónica, los cabritos experimentan estreñimiento y diarrea alternados. La patología es causada por gusanos planos, que pertenecen a la familia Fasciolidae. Conducen a daño hepático. La forma más peligrosa de patología para los animales jóvenes es la forma aguda de patología causada por la migración de larvas.
A medida que avanza la enfermedad, se observa debilidad general, palidez de las membranas mucosas y alteraciones de la función digestiva en forma de estreñimiento y diarrea. También se produce hinchazón de las extremidades, el abdomen y el pecho, la orina se vuelve roja y se cae el cabello.
Otra enfermedad peligrosa es la piroplasmosis. Es causada por organismos unicelulares parásitos de la sangre: Babesia. Infectan los glóbulos rojos, lo que provoca lisis. La infección se produce por picaduras de garrapatas. 5 a 12 días después de la picadura, la temperatura aumenta a 42 grados, se produce debilidad severa y aumenta la frecuencia de las contracciones del corazón y la respiración. Los niños también sufren de estreñimiento, hipotensión ruminal y orina turbia.
Con este diagnóstico se realiza terapia de infusión.En este caso, se administran por vía intravenosa solución salina, glucosa con una concentración del 5% y "Hemodez". La terapia específica incluye una solución de azidina con una concentración del 5%.
Medidas de diagnóstico
Para realizar un diagnóstico certero se recomienda consultar a un veterinario. Los estudios se prescriben teniendo en cuenta el cuadro clínico. Las muestras fecales ayudan a identificar infestaciones helmínticas.
A menudo se realiza un estudio hematológico. Este procedimiento suele ser necesario si se sospecha piroplasmosis. La microscopía revela muchos glóbulos rojos destruidos y parásitos con forma de pera en las células sanguíneas.
Cómo tratar la obstrucción intestinal en un animal
El estreñimiento puede indicar una obstrucción intestinal. Se desarrolla bajo la influencia de varios factores. En la mayoría de los casos, el problema se puede solucionar rápidamente.
Los medicamentos solo ayudarán con el bloqueo mecánico de los alimentos. En tal situación, se prescriben laxantes. También puedes hacer un enema.
Posibles problemas
En ausencia de un tratamiento oportuno, existe el riesgo de consecuencias indeseables. Muchas enfermedades pueden provocar la muerte de los animales o alteraciones en su desarrollo. También existen una serie de patologías infecciosas que pueden provocar la muerte de todo el ganado.
Prevenir el estreñimiento
Para evitar trastornos intestinales, se recomienda seguir las siguientes reglas:
- alimentar a los niños correctamente, teniendo en cuenta la edad y la productividad;
- no le dé a sus mascotas verduras, heno o paja en mal estado;
- equilibrar la dieta incluyendo nutrientes en función del estado fisiológico;
- no permita que las mascotas cambien repentinamente de un alimento a otro;
- mezclar forraje con pienso suculento;
- dar a los animales sólo agua limpia y fresca;
- Proporcione a los niños caminatas activas que duren al menos 2 horas.
El estreñimiento en los niños es bastante común y puede indicar patologías peligrosas. Para evitar consecuencias indeseables, es necesario realizar un diagnóstico correcto y seguir estrictamente las recomendaciones del veterinario.