La actinomicosis afecta con mayor frecuencia al ganado vacuno. Esta es una enfermedad fúngica que afecta a los animales con más frecuencia en otoño e invierno cuando se mantienen en establos. Se caracteriza por la formación de tumores en las zonas afectadas. Consideremos las formas y síntomas de la actinomicosis bovina, el tratamiento con medicamentos económicos pero efectivos, el diagnóstico y las medidas preventivas.
¿De dónde viene la enfermedad?
En las vacas, la actinomicosis afecta la mandíbula inferior, la cabeza, el cuello, los huesos, los ganglios linfáticos, la lengua y la cavidad bucal y la ubre. Los agentes causales son los hongos Actinomyces bovis. Son comunes en la naturaleza; el ganado puede infectarse cuando pasta o come heno o paja de cultivos de cereales.
Los hongos ingresan al cuerpo de las vacas a través de dientes enfermos, microtraumatismos en las membranas mucosas de la boca y el tracto digestivo, la piel y los pezones. En la práctica, se ha establecido que en casa un animal puede infectarse al comer alimentos ásperos (los tallos afilados dañan la lengua o la cavidad bucal, el hongo penetra a través de las heridas). El hongo supone un peligro especial para el ternero durante el período en el que le empiezan a crecer los dientes.
En el sitio donde invade el hongo, comienza un proceso inflamatorio y crece un granuloma. En el centro de formación, el tejido se vuelve necrótico y luego aparece tejido fibroso. La enfermedad progresa, los abscesos se abren y forman fístulas que no sanan en mucho tiempo. El hongo también afecta los tejidos cercanos, provocando la formación de una cicatriz. El patógeno puede penetrar en los vasos sanguíneos, propagarse a través de la sangre por todo el cuerpo, incluido el tejido óseo, y formar nuevas lesiones.
Síntomas
Los síntomas que manifestará la actinomicosis dependen del lugar de introducción del hongo y de la capacidad del cuerpo de la vaca para resistir la infección. Un síntoma común puede considerarse la formación de actinómica en forma de tumores densos, indoloros pero que se extienden.
Lesiones de cabeza y cuello
Los actinonomicomas pueden ubicarse en la mandíbula inferior, en la mejilla, en el pómulo y en el cuello cerca de la laringe. Los bultos eventualmente se rompen (hacia afuera o hacia adentro), fluye pus de ellos y es posible que se mezcle sangre.Si los actinomicomas se encuentran en la mandíbula inferior, el hocico del animal puede hincharse, los dientes pueden caerse y la saliva puede salir de la boca.
Si se han formado tumores en la lengua, ésta se hincha, se vuelve “leñosa” y se cae de la boca. Cuando la boca y las encías de la lengua se ven afectadas, la vaca no puede comer y pierde peso, aunque no pierde el apetito. Esto conduce a una disminución de la productividad.
Afectación de los ganglios linfáticos
Se forma un absceso encapsulado en los ganglios linfáticos de la vaca afectados por el hongo. Los actinomicomas afectan los ganglios linfáticos submandibulares, bucales y cervicales. Los tumores son densos, con el tiempo forman fístulas con liberación de pus cuando se produce una infección.
En algunos animales, las formaciones en los ganglios linfáticos pueden desaparecer y se produce una mejora temporal, pero luego la actinomicosis vuelve a aparecer. Una vez abierto el absceso, la temperatura del animal puede aumentar durante un tiempo y la zona afectada puede hincharse.
Actinomicosis de la ubre.
Los tumores que varían en tamaño desde un frijol hasta un huevo se localizan debajo de la piel del órgano o en la profundidad de los lóbulos, con mayor frecuencia los posteriores. Se abren hacia afuera o hacia los conductos de la leche. En este caso, su contenido acaba en la leche. No puedes beberlo. El tumor es denso, indoloro, crece rápidamente y puede alcanzar tamaños grandes.
Forma generalizada
Rara vez observado en vacas. En este caso, se ven afectados varios órganos internos: hígado, riñones, pulmones, tracto gastrointestinal, uréter.
¿Cómo diagnosticar la actinomicosis?
Es imposible no notar los tumores, al menos los que se encuentran debajo de la piel, ya que no son pequeños. Pero para determinar con precisión la actinomicosis, es necesario un diagnóstico. Para el análisis, se extrae pus de las fístulas, tejido de granuloma, esputo, orina y se realiza una biopsia para el examen histológico.La actinomicosis se diferencia de la actinobacilosis en que las enfermedades son similares en síntomas y curso. La diferencia entre ellos es que en el primer caso el daño suele producirse en los huesos, en el segundo, en los tejidos blandos. La actinomicosis causada por un hongo debe distinguirse de la tuberculosis, la osteomielitis y los abscesos simples.
Métodos de tratamiento y prevención.
Los actinocomas son indoloros y por tanto no provocan molestias en las vacas, excepto las localizadas en la cavidad bucal. Pero esto no significa que no sea necesario hacer nada. La mayoría de los animales no se recuperan por sí solos y, por lo tanto, requieren tratamiento. La terapia debe ser realizada por un veterinario, será difícil hacerlo usted mismo. El pronóstico del tratamiento en la mayoría de los casos es favorable si solo se ven afectados los tejidos blandos; si se ven afectados huesos y órganos internos, el tratamiento puede resultar ineficaz.
Proporcionar primeros auxilios
Antes de comenzar el tratamiento, retire la vaca del rebaño general y colóquela en un establo separado. Debe estar seco y limpio. Trate la hinchazón con una solución de yodo o antisépticos. No necesitas hacer nada más.
Cuidado de la salud
Al inicio de la enfermedad, se utilizan preparaciones de yodo (yodinol, solución de yodo, yoduro de potasio), se administran por vía oral y se inyectan en las focas. Si el tumor es grave y se ha desarrollado durante mucho tiempo, se requerirán infusiones intravenosas. La terapia con antibióticos tiene un buen efecto: la oxitetraciclina se inyecta en las formaciones de un toro o una vaca todos los días, el curso del tratamiento es de 4 a 6 días, o se inyecta polimixina una vez cada 1,5 semanas. Por lo general, durante este tiempo las neoplasias logran resolverse.En casos graves, se utiliza bencilpenicilina (para animales que no son alérgicos al fármaco). Es importante completar el curso de la terapia, incluso si parece que los tumores han desaparecido.
Si una banda de tumores está inflamada, después de la terapia con antibióticos con eritromicina, levomicetina y tetraciclina, se utiliza su extirpación junto con cápsulas. En caso de recaída, será necesaria una intervención repetida.
Después de la terapia es necesario esperar de 3 a 5 semanas, si la actinomicosis no regresa, podemos suponer que está vencida.
Acciones preventivas
Los establos de animales enfermos se desinfectan con una solución al 2-3% de álcali cáustico o cal apagada. Medidas preventivas: las vacas no deben pastar en áreas donde se hayan producido brotes de actinomicosis en pastos húmedos. Si es posible, cocine al vapor la fibra para suavizar los tallos. De esta forma existe la posibilidad de que el animal no se pinche la lengua, las encías o las mucosas y se infecte. Además, la exposición a la temperatura reducirá la cantidad de patógenos, y no solo los actinomicetos, sino también muchos otros.
La actinomicosis bovina es una enfermedad infecciosa peligrosa que afecta al ganado durante el período de establo. Los animales se infectan al comer heno y paja que contienen el patógeno, un hongo. El tratamiento con antibióticos y cirugía suelen ser eficaces, pero no en estadios avanzados. Por lo tanto, debe controlar a sus animales y contactar a un veterinario ante los primeros signos sospechosos. Los medicamentos utilizados para el tratamiento están disponibles y son económicos y se pueden comprar en cualquier farmacia.