El desarrollo de la pietín en las ovejas se produce debido a la infección del animal con una bacteria gramnegativa. La enfermedad es contagiosa y provoca complicaciones graves. El curso de la patología se acompaña de pudrición y destrucción de los tejidos que forman las pezuñas. En ausencia de un tratamiento adecuado, la enfermedad provoca la muerte del animal infectado. Además, una vez finalizada la terapia, las ovejas no desarrollan inmunidad contra esta bacteria.
Historia de la enfermedad. Daño económico
Los primeros casos de animales domésticos infectados con pietín se registraron hace más de 300 años.Inicialmente, esta patología no se identificó como un grupo separado, ya que no se establecieron las causas del desarrollo de la enfermedad. Algunos investigadores han sugerido que la pietín es un síntoma de necrobacteriosis. Oficialmente, esta patología fue identificada como una enfermedad separada en 1938 por un científico británico. Esto sucedió debido al hecho de que el investigador identificó el agente causante de la pudrición de las pezuñas.
La enfermedad se considera altamente contagiosa. En la Unión Soviética, durante los años 50 y 70 del siglo pasado, se registró varias veces una infección masiva del ganado con pietín. Los casos de infección se detectaron con mayor frecuencia en las regiones del sur del país.
La enfermedad causa daños económicos importantes porque:
- reduce la cantidad de carne y lana obtenida de ovejas;
- debilita a la descendencia;
- altera la reproducción normal del ganado;
- debilita la inmunidad de los animales jóvenes a otras patologías.
Si el ganado está infectado, el volumen de carne producida disminuye entre un 20 y un 40% en comparación con indicadores anteriores, la leche, entre un 20 y un 60%, y la lana, entre un 10 y un 40%.
Causas de la enfermedad
La enfermedad se desarrolla después de la infección con la bacteria anaeróbica Bacteroides nodosus. La infección ocurre principalmente durante el pastoreo al aire libre. El patógeno permanece viable en la hierba durante dos semanas y en las pezuñas durante un año. Por lo tanto, es posible la infección de animales en el corral.
Los siguientes factores pueden provocar el desarrollo de enfermedades en un rebaño:
- alta humedad;
- condiciones insalubres de detención;
- espacio insuficiente en el corral, por lo que los animales están constantemente en contacto entre sí;
- falta de una superficie dura en el área para caminar;
- cambio raro de basura;
- daño a los cascos;
- debilitamiento de la defensa inmune.
La infección ocurre con mayor frecuencia en otoño y primavera, cuando aumentan las precipitaciones. Por ello, para evitar infecciones, se recomienda que después del pastoreo se traten las pezuñas con lejía, fenol o formaldehído, que destruyen el patógeno.
Síntomas de la enfermedad.
Los síntomas de la enfermedad, según la naturaleza de los factores que la acompañan, aparecen entre 5 y 20 días después de la infección. La patología en la etapa inicial es aguda, pero con el tiempo se vuelve crónica. Esto significa que los síntomas de la pietín pueden reaparecer varios meses después de que el animal se haya recuperado.
Esta patología en la etapa inicial de desarrollo provoca:
- enrojecimiento del tejido en el sitio de la infección;
- hinchazón;
- perdida de cabello;
- formación de moco en el espacio entre pezuñas;
- desprendimiento de la herradura;
- la aparición de mal olor procedente del casco afectado;
- secreción de masas purulentas.
El animal infectado se inquieta y deja de pisar la pata afectada. En algunos casos, el zapato córneo se cae. Más a menudo, estos síntomas aparecen en una o dos piernas, con menos frecuencia en cuatro.
La pietín se desarrolla en tres etapas: leve, moderada y grave. A menudo, la enfermedad se cura en la primera o segunda etapa. Si la patología se puede curar, entonces se restaura el tejido afectado. Sin embargo, después de esto, se nota la deformación de los cascos. Uno de los rasgos característicos de esta patología es que la temperatura corporal del animal no aumenta, mientras que la zona afectada permanece caliente.
Establecer diagnóstico
El diagnóstico primario se realiza basándose en un examen externo del animal y la recopilación de información sobre los síntomas. Para confirmar la conclusión preliminar, se toma material de la zona afectada y se realiza un examen bacteriológico del raspado.El diagnóstico final se realiza sujeto a la identificación de microflora patógena en las muestras tomadas.
Métodos de tratamiento para la pietín.
La recomendación anterior sobre el tratamiento de las pezuñas con formaldehído y otras sustancias se refiere principalmente a la prevención de infecciones. Pero las mismas soluciones también son aplicables al tratamiento de la patología.
Como parte del tratamiento del pietín, la zona afectada se trata con un 10% de formaldehído o un 5% de paraform. Al mismo tiempo, se eliminan las zonas afectadas con un bisturí y otros instrumentos. Después de cada uno de estos procedimientos, se recomiendan baños con una solución de formaldehído al 10%. Se recomienda cortar el tejido afectado y luego tratarlo cada 2 días hasta que los síntomas desaparezcan por completo.
Para prevenir la propagación de la enfermedad y la aparición de una infección secundaria, estos medicamentos deben combinarse con antibióticos de amplio espectro: Bicillin-5, Biomycin o Nitox 200. No se recomienda realizar estas manipulaciones en casa. Esto se debe al hecho de que para curar completamente al animal, es necesario eliminar por completo el tejido afectado.
Posible peligro
En ausencia de un tratamiento adecuado y oportuno, la pietín conduce a las siguientes complicaciones:
- necrosis tisular de la extremidad afectada;
- la formación de fístulas en diferentes partes del cuerpo, incluida la cavidad bucal y la ubre;
- endometriosis;
- agotamiento del animal.
En casos avanzados, la pudrición de las pezuñas provoca una sepsis extensa, por lo que el animal muere.
Prevención e inmunidad.
Para prevenir la infección de las ovejas con pietín, se recomienda:
- retire periódicamente el estiércol y cambie la cama del corral;
- mantener a los animales en áreas bien ventiladas;
- no permita que aumente la humedad en el corral;
- proporcionar una nutrición adecuada a las ovejas;
- Limpiar las pezuñas cada 2 meses;
- Cada seis meses, trate las pezuñas con una solución de formaldehído al 10% o una solución de sulfato de cobre al 20%.
Como se señaló, después del tratamiento, el cuerpo del animal no desarrolla una inmunidad estable al patógeno. Por tanto, es posible una reinfección. Una vacuna artificial, que los veterinarios utilizan periódicamente, produce un buen efecto durante un período de tiempo limitado.