Los propietarios de caballos deben conocer los tipos y características del apareamiento, los criterios para la correcta selección de los animales. De lo contrario, existe el riesgo de diluir la raza de pura raza y reducir el número de animales. La etapa principal del apareamiento es la inseminación, que en los caballos se realiza mediante tres métodos naturales y artificiales. La tarea del propietario es elegir un método de reproducción conveniente, controlar el comportamiento de los animales durante el proceso y luego monitorear el progreso de la gestación.
- ¿Cómo se reproducen los caballos en la naturaleza?
- ¿Qué es mejor: el apareamiento libre o el apareamiento controlado?
- Selección de caballos para apareamiento.
- ¿Cómo saber si una yegua está en celo?
- Métodos de apareamiento de caballos
- Inseminación artificial de yeguas
- Embarazo y parto del caballo.
- Cuidado posparto
¿Cómo se reproducen los caballos en la naturaleza?
Las condiciones naturales regulan el número de individuos en una manada salvaje. Los animales se aparean en primavera y hasta mediados de verano. La manada está compuesta por un macho y hasta 12 yeguas, de las cuales una principal es la alfa. Es la hembra alfa la que prefiere el semental durante la época reproductiva. La función del macho es proteger y cubrir a las hembras. Está listo para aparearse durante todo el año, a menudo apareando yeguas sin estro, pero en este caso no se produce el embarazo. La cópula puede ocurrir varias veces, lo que hace que la fertilización sea más probable.
La reproducción natural incontrolada tiene ventajas y desventajas. Aspectos positivos del proceso:
- naturalidad;
- inseminación durante la ovulación;
- a la yegua sólo le interesa un semental fuerte y sano, lo que tiene un efecto positivo en el acervo genético;
- la descendencia se adapta a las condiciones de vida desde el nacimiento;
- un semental puede embarazar a varias yeguas.
Desventajas del proceso natural:
- un semental inexperto puede alejarse de la yegua durante la eyaculación, por lo que no se producirá la fertilización;
- existe una alta probabilidad de endogamia;
- Prácticamente no hay forma de preservar la raza pura.
¿Qué es mejor: el apareamiento libre o el apareamiento controlado?
En las granjas de caballos, el proceso de inseminación lo controla una persona, ya que le conviene preservar las razas puras, aumentar el número de animales y mejorar las cualidades de la raza.
El tejido controlado tiene varias ventajas sobre el tejido natural:
- La probabilidad de una inseminación exitosa es del 95%.
- Existe la oportunidad de preservar y restaurar la raza.
- El semental se puede mantener separado de la manada.
- Existe la oportunidad de mejorar las cualidades de la raza.
Un semental joven puede preñar de 20 a 25 yeguas, un caballo maduro, el doble.
Selección de caballos para apareamiento.
El propietario debe prestar atención a la salud de los individuos, el carácter, las características de comportamiento y el pedigrí. Es mucho más importante seleccionar el mejor semental, ya que el potro le quita la mayoría de las características hereditarias y las características de la yegua son menos importantes.
El principio de selección de caballos para inseminación:
- Las personas deben tener aproximadamente la misma altura, de lo contrario la cobertura resultará problemática.
- El semental debe estar sano, fuerte, sin defectos físicos ni de comportamiento.
- Ambos individuos deben cumplir con los estándares de la raza en cuanto a características externas y de comportamiento.
- La edad óptima de una yegua para la inseminación es de 3 años. No se debe permitir que un caballo sea demasiado joven para aparearse; debido a la inmadurez de su sistema reproductivo, puede producir descendencia débil y no viable. Esto tampoco debería sucederle a las yeguas viejas; tienen una alta probabilidad de desarrollar tumores y formaciones quísticas de los órganos reproductivos.
- Para mantener caballos de pura raza, se seleccionan caballos de la misma raza.
¿Cómo saber si una yegua está en celo?
Cuando comienza el celo, el comportamiento de la yegua cambia. Ella:
- levanta la cola;
- inclina la cabeza;
- extiende ligeramente las patas traseras;
- chilla en voz baja.
El semental se interesa por su novia. Él la huele, mordisqueándole el cuello con los dientes. El principal signo del estro es la secreción de una masa mucosa amarillenta de la vagina. Hay orina excesiva. La vulva se hincha, sus membranas mucosas quedan expuestas debido a la contracción de los músculos. Los caballos maduros se ponen nerviosos, irritados y andan cerca de los sementales. Las hembras jóvenes, por el contrario, se vuelven tranquilas y confusas.
Cuando el semental se acerca por detrás, la yegua se levanta como si estuviera a punto de defecar. Emite una pequeña cantidad de orina, lo que indica que está listo para aparearse. La cópula dura de 12 a 20 segundos.
La caza sexual dura de 2 a 3 días. Después de una inseminación exitosa, la yegua ya no permitirá que el semental se acerque a ella.
Métodos de apareamiento de caballos
La inseminación natural de caballos bajo supervisión humana se realiza de tres formas:
- El método manual es el más utilizado. Ideal para mantener caballos en boxes. La inseminación se completa con éxito en el 95% de los casos. El semental y la yegua se presentan en un pequeño corral y se les da tiempo para olfatear. A la yegua se le quitan las herraduras, se lava la vulva y se levanta la cola. Para evitar que el semental resulte herido, se utiliza un arnés de cría.
- El método de cocción es la mejor opción si los caballos se mantienen en manadas. Al caballo se le permite formar parte de una manada de 3 a 7 yeguas ubicada en un prado. El semental caza a las yeguas, se produce la inseminación.
- Kosyachny es otro método de inseminación en rebaño que se lleva a cabo durante la temporada de apareamiento. Los caballos se dividen en cardúmenes: grupos de un macho y 25 hembras. La inseminación se completa con éxito en el 100% de los casos.
Inseminación artificial de yeguas
Las grandes ganaderías suelen utilizar la inseminación artificial. La selección de caballos es estándar.
Ventajas del método:
- alta eficiencia de inseminación (una dosis de esperma es suficiente para inseminar a 20 hembras);
- la posibilidad de utilizar un banco de esperma de los mejores productores;
- ningún riesgo de infección o lesión para los caballos;
- imposibilidad de agotar el semental.
En primer lugar, se extrae esperma del semental. Primero se comprueba la salud del semental y se realizan las pruebas necesarias. El esperma se transporta en una caja congeladora. La introducción del líquido seminal en la vagina de la yegua la realiza un veterinario-inseminador. Para que la inseminación se realice de forma segura, las patas del caballo suelen tener que fijarse con una máquina especial.
Embarazo y parto del caballo.
Las yeguas llevan un feto durante 340 días (más o menos 2 semanas), lo que equivale aproximadamente a 11 meses. Se observan signos evidentes de embarazo en las últimas etapas. El dueño de una yegua puede saber que está preñada por los siguientes signos:
- apetito aumentado o débil;
- letargo del caballo;
- agrandamiento de la ubre;
- ignorando al semental;
- deseo de estar solo;
- Compactación del abdomen, palpable desde los lados a la palpación.
En una etapa posterior, al escuchar el abdomen, se puede escuchar claramente los latidos del corazón fetal. Para detectar la preñez precoz en una yegua, lo mejor es que el propietario consulte a un veterinario. Utiliza los siguientes métodos:
- examen rectal o anal (la inseminación exitosa está determinada por los cambios en el tono uterino);
- Ultrasonido (le permite detectar el embarazo ya en el décimo día después de la inseminación);
- análisis de sangre y orina para detectar hormonas;
- análisis de frotis vaginal.
Caballo preñado Puede volverse más agresivo, por lo que todos los procedimientos deben realizarse con cuidado y calma. El proceso de nacimiento dura unos 30 minutos. Si no hay complicaciones, entonces no se necesita la ayuda de un veterinario. Una yegua que da a luz se comporta inquieta, normalmente se tumba sobre la cama, pero también puede dar a luz de pie. No es necesario molestarla con tu atención, basta con mantenerte a distancia para controlar el proceso.
El potro nace de cabeza. Sucede que el feto gira hacia adelante con las patas traseras. Entonces se requiere atención veterinaria. Al cabo de unos 10 minutos, la yegua que ha parido se levanta. En este caso, el cordón umbilical se rompe. Si la yegua da a luz estando de pie, el cordón umbilical se rompe cuando el potro cae al suelo. Si el cordón umbilical no se rompe, se debe cortar con unas tijeras esterilizadas y atar con hilo.
Cuidado posparto
Después del parto, es necesario cuidar con esmero a la yegua y al potro. Para que el caballo recupere sus fuerzas necesita un descanso de media hora. Durante este tiempo, el propietario debe lavar las partes del cuerpo que se ensuciaron durante el proceso de parto: patas traseras, ubre, trasero, cola. También es necesario sustituir la basura sucia.
Inmediatamente después de dar a luz, la yegua lamerá al potro, lo alimentará y luego se pondrá de pie. Aproximadamente una hora después del nacimiento, sale la placenta. Será eliminado inmediatamente. La yegua criada es alimentada y abrevada. El flujo vaginal en una yegua que ha parido se observa durante aproximadamente una semana, por lo que habrá que cambiar la ropa de cama a diario.
Si han pasado 2 horas después del nacimiento y la placenta no ha salido, debes llamar inmediatamente a un veterinario.
El potro recién nacido se seca con una toalla limpia. Escuche su respiración; debe ser tranquila y uniforme. Cuando la yegua ayuda al ternero a levantarse, debes observar con atención si cojea.
Después de 2 horas, el potro ya está bebiendo leche materna. Si el reflejo de succión no se manifiesta, entonces habrá que extraer la leche de la yegua y dejar que el bebé beba del biberón. El potro debería expulsar meconio 2-3 horas después del nacimiento. Si esto no sucede, es necesario provocar la evacuación intestinal insertando un dedo en el ano o dándole al bebé una cucharada grande de aceite de ricino. No se debe separar a un potro recién nacido de su madre.