Cultivar usted mismo tabaco para fumar en casa es una buena forma de ahorrar en la compra de cigarrillos. La planta no es caprichosa, se puede cultivar no solo en un terreno abierto y sin tierra, sino incluso en el alféizar de una ventana. Sin embargo, el cultivo requiere la creación de condiciones especiales que le permitan crecer completamente y formar hojas. Y para que no muera necesita los cuidados más básicos.
Características del cultivo de tabaco en casa.
A pesar de que cultivar tabaco para fumar no es difícil, es necesario elegir el lugar óptimo para ello en un apartamento o casa privada. Esta planta es termófila, por lo que las bajas temperaturas del aire no son adecuadas para ella. Puede que no muera, pero el sabor del producto final estará lejos de aquellos a los que el fumador está acostumbrado.
La calidad de las materias primas está influenciada por los siguientes factores:
- nivel de humedad;
- composición del suelo (concentración de sales y minerales en él);
- condiciones climáticas de la región;
- temperatura ambiente;
- Encendiendo.
Por lo tanto, antes de comenzar a propagar plántulas, piense detenidamente dónde colocarlas. Dependiendo de la zona climática de su región, un lugar en un balcón o en el alféizar de una ventana puede ser una mejor opción que, por ejemplo, un invernadero o un parterre abierto debajo de las ventanas.
Variedades adecuadas
Las variedades de tabaco que se pueden cultivar en casa se dividen en 3 variedades:
Grupo | Peculiaridades | Variedades populares |
oriental | La mayoría de las variedades de tabaco de esta categoría se consideran aromáticas. Contienen altas concentraciones de resinas y aceites esenciales que realzan el olor de los cigarrillos elaborados con esta clase de cultivos. | Samsun, Trebisonda, América, Dyubek, Asia Central. |
americano o de hoja grande | Estos tipos de tabaco tienen un alto nivel de fuerza. Su porcentaje de nicotina es superior al de los representantes de la serie aromática. | Burley, Maryland, Virginia. |
Cigarro | Variedades de tabaco de élite que requieren cuidados especiales. No se cultivan en casa con tanta frecuencia como los dos tipos descritos anteriormente. | La Habana, Sumatra. |
Se pueden cultivar varias variedades de tabaco a la vez.Pero trate de no sembrar semillas de diferentes variedades de plantas en una maceta; prepare un recipiente separado para cada una de ellas.
Condiciones de crecimiento
El tabaco se caracteriza por un crecimiento lento. Si planeas cultivarlo en interior, no hay restricciones sobre cuándo sembrar las semillas. Si tiene la intención de plantarlo más en el jardín, siembre 2-3 meses antes de plantarlo. Y no olvide proporcionar a la cultura las siguientes condiciones para su crecimiento.
Encendiendo
La planta debe colocarse en los rincones más luminosos de la casa. Las plántulas se colocan en los alféizares de las ventanas de un apartamento o en un balcón. Por la noche, se recomienda añadir luz adicional a los brotes jóvenes, para que crezcan más rápido.
Temperatura
El tabaco, como se señaló anteriormente, es un cultivo que ama el calor, por lo que en la habitación para su cultivo la temperatura del aire debe mantenerse entre 25 y 28 °C. Una fuerte disminución de estos indicadores provocará una parada en el crecimiento de la planta, cambios en la calidad y el sabor de las materias primas o la muerte de los arbustos.
¡Consejo! Si decides cultivar el cultivo en invierno, coloca las macetas cerca de fuentes de calor. Pero no los coloques directamente sobre la chimenea o la caldera: las temperaturas excesivamente altas son tan peligrosas para ellos como las bajas.
Capacidad
El tabaco requiere macetas espaciosas o cajas de madera largas y anchas. La planta tiene hojas extendidas, por lo que el espacio es importante para ellas.
Puede sembrar semillas en vasos de plástico y, cuando las plántulas crezcan un poco, trasplantarlas a un recipiente más grande o a un lecho de jardín. La maceta para el cultivo debe medir entre 15 y 25 centímetros, pero todo depende de la variedad que estés cultivando.
Suelo y fertilizantes
El tabaco crece bien en suelos franco arenosos con suficiente nitrógeno y potasio.Y dado que la planta es capaz de absorber rápidamente todos los nutrientes, la tierra en la que se encuentra debe fertilizarse con regularidad. Para esto son adecuados el gordolobo o los excrementos de pájaros. Si es necesario, el suelo se mezcla con cal para normalizar su acidez.
Al hacer su propia mezcla de tierra, use:
- tierra de jardín - 2 partes;
- arena – 1 parte;
- humus - 1 parte.
Formación de plantas
La formación de tabaco se lleva a cabo periódicamente y según sea necesario. Cuando el cultivo brota y entra en la fase de floración, se deben eliminar las inflorescencias junto con el exceso de brotes laterales. Esto evitará desperdiciar la energía de los arbustos manteniendo el crecimiento de masa verde innecesaria. No se requieren actividades de formación adicionales.
Plantación y cuidado
La planta del tabaco se cultiva a partir de semillas. Este proceso tiene las siguientes particularidades:
- para la siembra, elija solo granos fuertes y en buen estado;
- después de colocar el material de siembra en el suelo, no olvide regarlo abundantemente: al tabaco le encanta la humedad;
- los primeros brotes aparecen entre 3 y 7 días después de sembrar las semillas;
- para que las plantas plantadas en una maceta no interfieran entre sí, coloque las semillas a una distancia de 5 a 7 centímetros;
- Después de la descomposición en el suelo, no rocíe los granos con tierra, simplemente cubra el recipiente con una película adhesiva o vasos de plástico desechables.
Tan pronto como notes que las plantas han comenzado a echar raíces y a crecer activamente, retira todos los ejemplares pequeños y frágiles. Deje 1 de los arbustos de tabaco más fuertes en la olla.
Consejo.Si cultivas tabaco en una caja de madera o de plástico, puedes dejar de 2 a 3 plantas fuertes en cada una.
Para cultivar plántulas sanas, no olvide regarlas con regularidad. Para hacer esto, no es necesario esperar a que se seque la capa superior de tierra. El riego debe realizarse cada 2-3 días, utilizando al menos 1-2 litros de agua por arbusto.
La planta debe ser fertilizada según el principio descrito anteriormente. Además, puedes limpiar las hojas con un paño húmedo o rociarlas ligeramente: esto protegerá el cultivo de determinadas fitopatologías.