El pienso compuesto de Purina para codornices ayuda a los ganaderos a controlar el suministro racionado de proteínas, grasas y carbohidratos a las codornices, lo que garantizará un rápido aumento de peso y crecimiento de los animales jóvenes. Sin embargo, el alimento se utiliza en dosis limitadas y se siguen las recomendaciones de alimentación del fabricante. Ciertos tipos de alimentos comienzan a darse a los polluelos desde el primer día de vida.
Pros y contras de los piensos compuestos.
Los piensos compuestos se utilizan en granjas avícolas de alta tecnología debido a la rentabilidad del producto: no es necesario comprar elementos individuales y mezclarlos usted mismo.Las partículas de alimento trituradas se pueden verter fácilmente en alimentadores automáticos, lo que reduce los costos de mano de obra. En función del contenido de nutrientes del pienso, el granjero calcula el aumento de peso vivo del ave, la fecha de sacrificio, la puesta y el número de huevos recibidos.
Sin embargo, con todas las ventajas del pienso Purina, también existen varias desventajas. Para cada categoría de edad de codornices, es necesario comprar diferentes composiciones, porque los animales jóvenes no pueden comer lo mismo que las aves adultas. Los piensos compuestos no se almacenan durante mucho tiempo y no se debe dar a los animales productos en mal estado. Los envases abiertos deben almacenarse a una temperatura y humedad determinadas.
Composición del producto
La principal diferencia entre los piensos para codornices es el mayor contenido de proteína cruda, que en ocasiones alcanza hasta el 30% de los nutrientes totales. El porcentaje de proteína lo proporcionan las plantas de cereales: trigo, cebada, maíz. Esto también incluye los minerales necesarios para la formación de la cáscara del huevo: harina de piedra caliza, fosfatos, sal y refrescos.
Los antioxidantes ayudan a reducir la tasa metabólica, lo que permite que las aves ganen peso más rápido.
Reglas para usar Purina para codornices.
Una codorniz adulta necesita entre 25 y 27 gramos de alimento para mantener su funcionamiento normal y poner huevos. Cada ave debe tener libre acceso al comedero; de lo contrario, los animales más fuertes tomarán comida del resto. Las aves destinadas al engorde deberán tener libre acceso a alimentos y agua. En promedio, se consumen 6,5 kg de alimento por ave durante el período de puesta.