Al conservar los tomates, surge una molestia: durante la esterilización, se cubren de grietas. Se desconoce el motivo por el que esto sucede. Pueden ser de la misma variedad, recolectados al mismo tiempo y aproximadamente del mismo tamaño. Por eso, no es de extrañar que muchas amas de casa se pregunten: ¿cómo salar los tomates para que no revienten después? Veamos algunos consejos básicos.
¿Por qué los tomates revientan cuando se enlatan?
Hay varias razones para esto:
- Se utilizan variedades sin salazón. Las verduras destinadas a torcer tienen una piel gruesa.No se agrieta al salarlo.
- Se tomaron frutos demasiado maduros. Debe elegir sólidos con una superficie lisa. Es recomendable tomar Crema. Son más carnosos. Prácticamente no se agrieta.
- Cambio repentino de temperatura. Por lo tanto, la salmuera caliente se debe verter lentamente.
Los tomates se agrietan si se guardan bajo una manta caliente después de conservarlos.
¿Necesito perforar los tomates al enlatar?
Esto no es necesario, pero si quieres protegerte, deberás perforar la base, donde está el tallo. Utilice un tenedor, una aguja o un palillo. Esto reduce la tensión de la película.
Se debe perforar hasta la mitad de la verdura. Entonces prácticamente no se agrietan. En el frasco sólo puedes encontrar un par de piezas con grietas. Cuando la profundidad de la punción es pequeña, el 70% de los tomates estallan.
Si no quieres perforarla, debes enrollar las verduras en un adobo a 75°C. Así la diferencia de temperatura no será grande, permanecerán intactos.
¿Cómo salar y marinar adecuadamente los tomates para que no revienten?
Al encurtir tomates en un frasco, vierta un poco de marinada caliente en el fondo del frasco. Después de que se empañe, vierte el resto del líquido. Esto evitará que las verduras y el frasco se agrieten.
Al marinar, cubra las frutas con hojas de rábano picante. De esta forma, el líquido caliente caerá sobre las sábanas. Si los tomates se enlatan por la mitad con pepinos, estos últimos se colocan encima. No se agrietarán si entran en contacto con agua hirviendo. Debes llenarlo a intervalos de unos segundos. De esta forma el tarro y las verduras se irán calentando poco a poco.
Hay dos formas de salar los tomates: frío y caliente. Si la piel es fina, es necesario hacer pinchazos. Con el método frío, es mejor tomar frutas elásticas. Durante la salazón, se vierten con salmuera y se ejerce presión encima. Los blandos quedarán completamente triturados.