La grosella espinosa es una baya muy conocida. Tiene muchas variedades y sabores y es muy adecuado para mermelada. Además, al cocinar, puedes experimentar con los ingredientes: las grosellas combinan bien con las frambuesas, las grosellas, la naranja y el limón. Pero hay otra receta interesante: mermelada de grosella con menta. El sabor de este postre es exquisito y original. Podrás sorprender a tus seres queridos con esta mermelada preparando tarros para el invierno.
Características de la receta
A menudo, las grosellas tienen una piel gruesa que no permite que el azúcar se filtre en su interior. Por ello, se recomienda perforar cada baya o cortar las colas con un cuchillo o tijeras, cortar ligeramente la piel y exponer la pulpa.
Para darle acidez a la mermelada, también conviene utilizar medio limón. Combina bien con la menta y la mermelada quedará aún más original. Además, el limón es conservante. Por tanto, su uso asegurará una larga vida útil de las piezas de trabajo.
Ingredientes requeridos
Para preparar mermelada de menta y grosella necesitarás los siguientes ingredientes:
- 1 kilogramo de grosellas;
- 1 kilogramo de azúcar;
- 2 vasos de agua;
- 8 ramitas de menta.
Para conservar mejor los frascos de mermelada, se recomienda añadir una pizca de ácido cítrico.
Reglas de selección de productos.
Para este postre, cualquier variedad de grosella es adecuada. Pero es mejor seleccionar solo bayas maduras; las verdes no podrán hervir adecuadamente en el puré. También debes deshacerte de las bayas en mal estado, ya que pueden estropear el sabor del postre.
Puede reemplazar la menta con bálsamo de limón; entonces el sabor del plato terminado será diferente, con un sutil aroma a limón. Además, estas hierbas combinan bien y se pueden combinar.
Preparando contenedores
Para las preparaciones de invierno, es mejor llevar pequeños frascos de vidrio. Es más conveniente utilizar tapones de rosca. En primer lugar, se visten sin dispositivos especiales. En segundo lugar, después de abrir, estas latas son más cómodas de usar. En tercer lugar, si desenroscas las tapas con cuidado, podrás utilizarlas varias veces.
Para que la mermelada no empiece a deteriorarse antes de que llegue el invierno, es necesario preparar el recipiente con antelación. Los frascos de vidrio deben lavarse y esterilizarse minuciosamente. Puedes hacer esto de la siguiente manera:
- llénalas un tercio con agua y mételas en el microondas;
- poner en una cacerola con agua y cocinar;
- llenar con agua y meter al horno;
- sostenga una tetera o sartén sobre el vapor.
Luego debes usar los frascos inmediatamente para que no tengan tiempo de ensuciarse. No es necesario dejar enfriar los frascos: la mermelada se puede transferir inmediatamente.
Cómo hacer mermelada de grosella con menta para el invierno.
Para preparar espacios en blanco para el invierno con grosellas y menta, necesita:
- Lavar las bayas y clasificarlas.
- Recorta las colas de caballo.
- Enjuagar nuevamente y escurrir en un colador.
- Coloque las bayas en una cacerola y agregue las ramitas de menta.
- En otra cacerola debes hacer el almíbar de azúcar: debes mezclar arena con agua, cocinar por 10 segundos y remover hasta que esté completamente disuelto.
- Ahora es necesario verter las bayas con almíbar y dejarlas enfriar debajo de la tapa.
- Después de 5 horas, debes llevar las bayas a ebullición y luego enfriarlas.
- Repita esto nuevamente, luego retire las ramitas de menta y vierta la mermelada en frascos esterilizados.
Cómo almacenar espacios en blanco
La temperatura óptima de almacenamiento para frascos de mermelada es de +5 a +20 grados. Por tanto, quedarán perfectamente conservados en el balcón, en el sótano o en el frigorífico.
Gracias al uso de una gran cantidad de azúcar durante la preparación, así como de ácido cítrico o limón, estas preparaciones pueden durar mucho tiempo.
Pero es mejor no correr riesgos y no conservarlos más de dos años.